Pueden ser estos los días más grises que he vivido – hasta el momento- puedo descubrir detrás de cada sonrisa una gran falacia y puedo llenarme de motivos para aun así no confiar en nadie.
Evito la ilusión como el amor »a toda costa», huyo, corro y salto de cada momento que puedan alimentarlas. Tal vez soy dura, pero prefiero mantener una posición en defensa contra cualquier movimiento que intente llenar mi alma; pues hoy en día nadie quiere, nadie busca hacer realidad una ilusión y mucho menos busca un amor sincero, así que si no está en las prioridades de una persona todo lo mencionado anteriormente, no permitiré que salgan de mi tales sentimientos.